Además de transferir la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el Presidente Andrés Manuel López Obrador pretende que soldados y marinos continúen realizando labores de seguridad pública en las calles del país después de marzo de 2024, buscando así instalar la Dictadura Militar y concretar el Totalitarismo.

Según el mandatario se buscará modificar leyes que no sean constitucionales, esta será la manera de sortear los obstáculos que está imponiendo la oposición para no aprobar ninguna propuesta de reforma constitucional que llegue desde el ejecutivo, aunque reconoció que lo mejor sería dejar plasmadas las modificaciones en la Constitución.

Y es que según López Obrador, el principal problema del país es la inseguridad que viven los mexicanos y para hacerle frente es necesario echar mano de las fuerzas armadas y perpetrar que se militarice el país.

Al momento la Oficina en México del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas en Derechos Humanos le dio un jalón de orejas al presidente Andrés Manuel López Obrador a mantener el carácter civil de la Guardia Nacional y de la seguridad pública en México.

A través de su cuenta de Twitter, recordó que la Alta Comisionada, Michelle Bachellet, ha insistido en el fortalecimiento de las instituciones civiles en México, en asegurar el carácter civil de las corporaciones de seguridad y en que el uso de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad pública es excepcional.