La Plaza Allende, es una de las plazas o explanadas más emblemáticas de los guanajuatenses, es un lugar más de los capitalinos que de los turistas, es un espacio, que sin duda, merece estar en mejores condiciones de las que se le encuentra, aunque por su tamaño, se puede decir que no está en tan mal estado.
Lo que más llama la atención, es la vandalización que las grandes estatuas de Quijote y Sancho se hizo con pintas relacionadas a protestas feministas, hoy esas manchas de pintura prevalecen y son testimonio, de lo poco que se preocupan protestantes y gobierno por el patrimonio, unos dañándolo y otros olvidándolo.
También hace falta una docena de lozas en el pretil frontal, así como mantenimiento a muchas losetas, aunque en lo general, no se pueden encontrar peligros, como registros faltantes, que son comunes encontrarlos en otras plazas.
Solo hace falta tapar un registro, que seguro es la ruta de escape, de plagas de ratas, que seguramente, se pasean por el jardín trasero en la oscuridad y tranquilidad de la noche, sin duda, otro de los problemas característicos del centro, tan transitado todos los días.