Connect with us

Cultura

Primer túnel de Guanajuato: Porfirio Díaz

Published

on

Guanajuato, Gto.- El túnel Porfirio Díaz es uno de los primeros túneles, sino es que el primero, de la ciudad de Guanajuato. Su construcción empezó en 1883 durante el mandato de Porfirio Díaz y su propósito inicial era solucionar la problemática de las inundaciones que afectaban reiteradamente la ciudad, ya que el río de Guanajuato se desbordaba en épocas de lluvias.

Se diseñó de tal forma que la estructura lograra canalizar el agua del río a la subterránea y así evitar que las calles se inundaran y era una gran obre de ingeniería de la época. Sin embargo, debido a la falta de recursos y varios problemas técnicos, su construcción fue suspendida en 1885, pero se retomó en 1906 y finalmente se terminó en 1908.

Este túnel recorre desde el Cerro de San Miguel hasta lo que hoy se le conoce como el Mercado de Embajadoras, atraviesa la ciudad debajo calles importantes de la ciudad, conectando con varias zonas que históricamente se veían afectadas por las inundaciones.

El túnel es uno de los más largos de la ciudad y durante muchos años cumplió su función de drenaje, pero con el paso del tiempo, esta construcción comenzó a deteriorarse debido a la falta de mantenimiento y su utilidad disminuyó.

Actualmente se mantiene cerrado para evitar accidentes y es considerado como parte del patrimonio histórico de la ciudad, pero debido a su estado, ya no cumple con su función original.

Advertisement
Advertisement

Cultura

Rescatan restos de cámara mortuoria de las antiguas culturas del desierto en Coahuila

Published

on

Cohahuila, México.- Al interior de una cueva subterránea profunda, ubicada en el Área Natural Protegida de Ocampo, Coahuila, especialistas del INAH realizaron un rescate arqueológico de un conjunto mortuorio de las culturas del desierto de 500 años de antigüedad aproximadamente.

La entrada de esta cámara era un agujero casi imperceptible en la inmensidad de las montañas. A 4 metros de profundidad luego de acceder, se encuentra una sala donde se encontraron los restos óseos. El lugar tenía forma semicircular donde yacían fragmentos de textiles, característicos de las culturas del desierto, revueltos con huesos humanos.

“Se trata de una cueva mortuoria prehispánica. Los cuerpos debieron estar envueltos en textiles, a modo de bultos, acompañados de diversos objetos y depositados en el suelo” mencionó De la Rosa, una arqueóloga que participó en el descubrimiento.

Este descubrimiento se dio a partir de una denuncia ciudadana sobre el saqueo del sitio; la INAH atendió el reporte e implementó acciones para proteger y estudiar los materiales. Sin embargo, la sala mortuoria ya estaba alterada debido al saqueo. De la Rosa asegura que tratarán de recuperar información relevante sobre estas poblaciones cazadoras-recolectoras.

Advertisement

Los arqueólogos destacan que estas culturas del desierto eran expertos en la elaboración de cuerdas de diferentes grosores, mismas que les permitían descender a las profundidades de las cuevas para llevar a cabo ritos mortuorios.

Actualmente se recuperaron cientos de huesos de todas las partes del cuerpo humano que, según los especialistas, estiman que corresponden a 17 cuerpos humanos y 15 fragmentos de textiles que corresponden a cuatro tipos de petates.

Continue Reading

Cultura

Guanajuatenses que dejaron huella: Josefa Teresa de Busto y Moya

Published

on

Guanajuato, Gto. 30 junio 2025.- Josefa Teresa de Bustos y Moya Xeres y Monroy nació en 1682 en la villa de Guanajuato y pasó parte de sus primeros años en Querétaro, pero regresó a Guanajuato tras casarse con Manuel Aranda y Saavedra.


Doña Josefa provenía de una familia acomodada, entre sus bienes se encontraban numerosas casas en la Villa de Guanajuato, haciendas y se beneficiaba, además, de la extracción de minerales en las minas familiares. Cuando enviudó en 1729, se hizo cargo los negocios, por lo tanto, empezó a tomar decisiones que tendrían un impacto positivo en el pueblo guanajuatense.


Ella veía necesario educar a los jóvenes de la villa de Guanajuato sin tener que dejar sus hogares para irse a otras partes, por ello, donó dinero y bienes para establecer un colegio de la Compañía de Jesús. Esta iniciativa fue apoyada por otros acaudalados mineros, quienes hicieron también donaciones.


En 1732 se creó una constancia ante el escribano don Félix Alfonso Martínez de León sobre su donación de 60, 000 reales, destinados a la manutención del colegio una vez construido; sin embargo, se necesitaba la autorización del rey Felipe V de España, quien finalmente la dio en 1744. No obstante, pasaron muchos años para que el rey de España diera este permiso y doña Josefa lamentablemente había fallecido dos años antes de la aprobación.


Durante el lapso de esos años se obtuvieron otros permisos como el del Virrey don Juan de Acuña y del obispo de Michoacán una autorización para que se asentaran varios padres jesuitas en Guanajuato con el fin de reunir a personal adecuado para el colegio.


En su testamento hizo énfasis en seguir apoyando económicamente la fundación del Colegio y en una escritura consta que doña Josefa cedió la casa que tenía en la calle de Cerero, hoy conocidas como la calle Lascuráin. Se trata del Edificio Central de la Universidad de Guanajuato, donde se imparten la carrera de derecho y administración pública.

Advertisement


La señora Josefa Teresa de Bustos y Moya pedía la fundación de un Colegio que al inicio fue para cientos de estudiantes, quizás nunca se imaginó que ese colegio se convertiría en lo que es hoy en día: la Universidad de Guanajuato, quien brinda a miles de jóvenes, solo solo de la capital, sino en todo el estado y más, una educación superior.


Un personaje histórico que impactó la ciudad profundamente.

Continue Reading

Cultura

¿Conoces la leyenda de las Momias de Guanajuato? ¡Aquí te la contamos!

Published

on

Guanajuato, Gto.– Entre 1865 y 1989 fueron exhumados más de cien restos óseos debido a que sus familiares habían dejado de pagar la cuota para seguir manteniéndolos sepultados en los suelos del panteón municipal Santa Paula. Para sorpresa de los trabajadores y la gente local en general, muchas de las exhumaciones presentaban momificación.


Entre estos cuerpos, algunos presentaban expresiones que sobresalían entre otros por su expresión tétrica, pues daban la impresión de que murieron aterrados y dicha emoción se congeló en su rosto hasta nuestros días. Ante este evento, surgió una teoría que se ha convertido en una leyenda con el pasar de los años y que explica este suceso.


Se cuenta que alrededor de 1833, toda la Capital de Guanajuato fue golpeada por una epidemia, se trataba de la peste de cólera morbos. Fueron tan grandes los niveles de mortandad en la zona que los cementerios no daban abastecimiento. No obstante, uno de los padecimientos de esta enfermedad era la paralización del organismo; es decir, las personas parecían estar muertas.


Las personas de la época desconocían este síntoma e inmediatamente que los enfermos daban señales de estar aparentemente sin vida, eran enterrados lo más pronto posible con el fin que la enfermedad no se propagara más. Las víctimas de la paralización del organismo, entonces, eran enterradas vivas y tras recobrar la consciencia, morían asfixiadas en un estado completo de desesperación y angustia.


Por esa razón, hay muchas momias con las expresiones tétricas que destacan e incomodan al visitante del Museo de las Momias. O eso es lo que la gente de Guanajuato cuenta…

Advertisement
Continue Reading

Seguridad

Trending