Ni la pandemia de covid-19 ni las guerras comerciales disfrazadas son obra de Dios, ni tampoco son signos apocalípticos; el mal prevalece en el mundo por el desvío de los hombres, su falta de cercanía con el Señor, aseguró Alejandro León Romero, Rector del Templo de la Compañía.

El alejamiento de los hombres y sus acciones sin el amparo de Dios ha generado las situaciones desagradables que estamos padeciendo, sin embargo, el amor de nuestro Señor debe darnos la tranquilidad de que todo esto pasará, la esperanza de que todo esté bien, sin miedos, sin pánicos.

LEAVE A REPLY

Please enter your comment!
Please enter your name here