La Policía Provincial de Ontario dijo que los 43 mexicanos, en su mayoría hombres, habían llegado ilegalmente a Canadá a través de una red de tráfico de personas.
Los mexicanos, que fueron rescatados tras una operación policial, vivían en precarias condiciones en unas barracas en la localidad de Barrie y eran transportados por la red criminal a trabajar en hoteles y establecimientos turísticos en la provincia de Ontario.
Las autoridades creen que las víctimas pagaron a las traficantes elevadas sumas de dinero para abandonar su país.
Las víctimas eran transportadas diariamente a hoteles y establecimientos turísticos del centro y sur de Ontario para trabajar como limpiadores.
Se les cobraba por alojamiento, transporte y muchos otros conceptos. Los traficantes controlaban sus salarios. Tras pagar esos costes, los trabajadores se quedaban con cantidades mínimas, en algunos casos de menos de 50 dólares al mes.
Los mexicanos fueron atraídos a la red criminal a través de anuncios en redes sociales en los que les prometieron oportunidades laborales en Canadá a cambio de elevadas sumas de dinero.
La Policía aseguró que los propietarios de los hoteles que contrataban a los mexicanos no sabían en qué condiciones se encontraban.
Los trabajadores rescatados se encuentran ahora alojados en un hotel de Barrie y según la Policía han recibido ofertas legales de empleo.
La investigación se inició en 2015, cuando la Policía recibió denuncias de la operación de una red criminal que explotaba a trabajadores extranjeros.
La operación culminó el pasado martes cuando cerca de 200 agentes de la Policía de Barrie y la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá rescataron a los trabajadores mexicanos en varios lugares de Barrie.