De manera cíclica, como cada año, el aguacate hass y otras variedades se han disparado en precio por diversos factores, entre ellos, y a decir de los comerciantes, el clima desfavorable que pudo haber malogrado las cosechas.

Sin embargo, también mencionan el posible ocultamiento por parte de productores para exportarlo a los Estados Unidos, dejando a los locales sin el preciado fruto.

Haciendo un poco de historia vemos que hace diez años en pleno auge de la guerra contra el narco, la producción aguacatera y el limón estaba tomada por los cárteles y eso hizo subir de manera desorbitada los precios, lo que se veía como normal por ese factor delincuencial, sin embargo, hoy día se pueden encontrar los mismos precios o un poco más altos; la pregunta es… ¿es por los mismos factores o cada año se inventan nuevos factores para incrementar precios que son absorbidos por comerciantes y consumidores?

La forma en que los mexicanos realizan los negocios deja desprotegidos a los mexicanos. Un caso son las uvas nacionales que traen puro desperdicio a precios muy altos, mientras las uvas estadounidenses vienen sin desperdicio a un precio más razonable.

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