Además del robo de combustible y el combate a la corrupción, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador enfrenta tres desafíos importantes que provienen del exterior: la desaceleración de la economía estadounidense, la aprobación del T-MEC y el futuro de la tasa de interés de la Reserva Federal, dijo este martes el economista en jefe para México y Canadá de Bank of America Merrill Lynch, Carlos Capistrán.

 

El experto pronosticó que el PIB estadounidense crecerá 2.5% este año, lo que provocará que la economía nacional avance solo 1%, una cifra muy lejana del rango estimado por el gobierno federal de entre 1.5% y 2.5% para el mismo periodo.

 

Además del PIB, existe incertidumbre por la aprobación del tratado comercial denominado T-MEC, pues la división que prevalece en el Congreso estadounidense podría implicar cambios en el mismo y ello llevaría a una mayor depreciación del tipo de cambio peso-dólar.

 

Para 2019, Bank of America Merrill Lynch estima un tipo de cambio de 20.50 pesos por dólar y una inflación de 4%.

 

En reunión con medios, el especialista explicó que el actual avance del peso obedece a que los mercados esperan una pausa en el alza de las tasas de la Fed, sin embargo, un posible cambio en la política monetaria estadounidense provocaría una tendencia contraria.

 

Capistrán estimó que el banco central estadounidense hará dos aumentos en su tasa de interés en el año, para dejarla en un rango de 2.75 y 3%.

 

Descartó una rebaja en la calificación de deuda soberana de México este año, ya que el superávit primario y el nivel de deuda contemplados en el presupuesto permiten un manejo responsable de las finanzas públicas.

 

Dijo que el futuro de las negociaciones entre Estados Unidos y China para desactivar una guerra comercial, así como la desaceleración del gigante asiático también generarán incertidumbre en los mercados.

 

Explicó que el actual avance del peso obedece a que los mercados esperan una pausa en el alza de las tasas de la Fed, sin embargo, un posible cambio en la política monetaria estadounidense provocaría una tendencia contraria.